La innovación es el eje principal para seguir avanzando y creciendo en la agricultura, el sector que actualmente encabeza la investigación y desarrollo dentro del sector primario. Como muestra de que no es un sector estancado y que necesita seguir creciendo y desarrollándose, hemos creado el proyecto Recolecta, con el objetivo de mejorar las condiciones de nuestros cultivos y así poder conseguir unos productos de mayor calidad.
¿Conoces cuáles son los principales propósitos que buscamos alcanzar a través de este proyecto? En esta colaboración impulsada por Florette Ibérica y en la que participan el Programa Nacional de Desarrollo Rural y el grupo operativo del Instituto Técnico de Canarias (ITC) tenemos como objetivo implementar un sistema de gestión agrícola inteligente y autónomo para las hortalizas de cuarta gama, es decir, aquellas que el consumidor puede encontrar en los supermercados ya limpias, troceadas y envasadas que nos ayude a seguir mejorando los procesos productivos de estos alimentos para poder ofrecer la máxima calidad de una forma eficiente.
Para ello estamos desarrollando las mejores tecnologías con el fin de recopilar, monitorizar y analizar a pie de campo nuestros cultivos a través de sensores, para poder así conseguir reducir costes, optimizar recursos y elevar la calidad de nuestras producciones.
¿Cuáles son las innovaciones que estamos llevando a cabo?
Utilizamos sensores y muestras para determinar la presencia de productos fitosanitarios en la tierra y comprobar de esta manera la calidad de la misma. Además, esto nos permite conocer qué trazas llegan hasta el empaquetado.
Mejora de la vida útil del producto terminado: Se está desarrollando un sistema de enfriamiento al vacío “vaccum cooling” que permite enfriar la materia prima de forma rápida justo a la entrada a fábrica, con lo que se minimiza de forma inmediata la respiración y actividad metabólica del vegetal.
Hemos diseñado también un sistema para poder envasar el producto con atmósfera protectora, mejorando así la calidad y la vida útil de los alimentos.
Maximizar la productividad y disminuir la evaluación del cultivo: Desarrollamos un sistema de gestión de las explotaciones agrarias a través de la integral térmica y la humedad (ambiente y en tierra junto a las raíces) para maximizar la productividad del cultivo en un 10% y disminuir el tiempo de evaluación del estado de los cultivos en un 50%, pasando de las 8 horas/semanales actuales a 4 horas/semanales.
Hemos creado un automatismo para poder descargar fotos satélite históricas de parcelas concretas, incluso llegando a sectores de riego, para posteriormente convertir esas fotografías de cultivos en valores numéricos procesables posteriormente a través de Machine Learning.
Buscamos mejorar la calidad de los recursos hídricos y reducción de la cantidad de cloro: nuevo sistema de desinfección de agua en la lavadora, que se denomina “ACUTAB”. La peculiaridad de este sistema es que trabaja con pastillas sólidas de hipoclorito cálcico, en lugar de cloro gas, por lo que permite la monitorización en continuo del nivel de cloro y del pH.
Se está reduciendo la huella hídrica dentro de la fábrica. Es decir, nuestro fin es eliminar posibles trazas de productos fitosanitarios y buscar alternativas para reducir el consumo del agua de lavado, consiguiendo así ampliar sus ciclos de utilización y dándole una vida útil más larga.
Mejora del suelo: Usamos bicarbonato obtenido a través de pirólisis de compuestos orgánicos, lo que nos permite aportar al suelo una mayor capacidad de retención del agua y favorecer la estabilización de microorganismos, incrementando así la vida útil de los cultivos.
A través de estas medidas buscamos garantizar la máxima calidad de los productos. Esto se debe a que a través de esta innovación en las tecnologías se nos permite recopilar las variables necesarias para testar la maduración correcta de las hortalizas, consiguiendo minimizar la pérdida de estas y permitiéndonos ofrecer así los mejores productos a los consumidores.